Bienvenidos a una nueva reseña de un juego de mesa familiar. En esta ocasión, vamos a ser los propietarios de unos hoteles muy especiales, porque nuestros huéspedes van a ser… ¡insectos!.
Intenta ser el primero en ocupar todas las habitaciones de tu hotel, llenándolas de “bichos” que llegarán voluntariamente… o atraídos por la miel que vas a poner para tentarles.
No será tan fácil, porque hay cucarachas que se intentarán comer la miel, y arañas que querrán espantar a tus huéspedes.
Datos Básicos
- Editorial: Mercurio Distribuciones.
- Duración de una partida: 15 minutos.
- Edad (indicada en el juego): +7 años.
- Edad (recomendada por nosotros): +4/5 años
- Cantidad de jugadores: de 2 a 4.
- Tipo de juego: memoria, azar.
¿Qué contiene el juego?
- 4 hoteles de insectos
- 20 cartas de miel
- 8 cartas de araña
- 8 cartas de cucaracha
- 36 cartas de insectos turistas (abejas, hormigas, moscas, mariquitas, mariposas y tijeretas)
En total, 72 cartas.
¿CUAL ES EL OBJETIVO DEL JUEGO?
Ser el primero en ocupar las 6 habitaciones que tiene su hotel, con los insectos adecuados.
PREPARATIVOS
Cada jugador coloca su hotel frente a sí, en la mesa. El mazo completo de cartas se baraja y se coloca en medio de la mesa, boca abajo.

¿CÓMO JUGAR?
El juego es muy sencillo. Antes de explicarlo, indicar que cada hotel admite 3 tipos de insectos, que aparecen dibujados. Y hay 2 habitaciones para cada uno. En total, 6 habitaciones que debemos completar.
Es un juego por turnos. En su turno, el jugador roba una carta del mazo central y según lo que saqué ocurrirá una cosa u otra:
- Si sale un insecto que puede alojarse en su hotel, lo coloca en la habitación.
- Si sale un insecto que NO puede alojarse en su hotel, lo deja boca abajo junto a su hotel, a modo de descarte. Ojo: el resto de jugadores deben fijarse bien en qué insectos va dejando cada jugador junto a su hotel, y memorizarlos, ya que van a ir quedándose boca abajo.
- Si sale una carta de miel, el jugador la deja junto a su hotel, boca arriba. Puede ir acumulando tantas cartas de miel como quiera.
- Si sale una cucaracha, ésta se come toda la miel que pudiese tener acumulada el jugador.
- Si sale una araña, el jugador puede espantar a un insecto del hotel de un contrario, siempre que esté “solo” en su piso. Si ya están alojados los 2 insectos iguales en el hotel del rival, no puede espantarlos.
Atraer insectos
Se atraen con miel. Cuando un jugador tiene acumuladas 2 cartas de miel, puede atraer a un insecto a su hotel. El insecto tiene que venir del mazo de descartes de un jugador rival. Y para cogerlo, tiene que decir primero el nombre del jugador a quien se lo quita, y luego, el insecto que quiere:
- Si acierta y el rival sí tenía ese insecto, lo atrae y lo aloja en su hotel. Y descarta en medio de la mesa 1 carta de miel, y la otra se la da al jugador rival (a modo de pago, más o menos).
- Si falla, igualmente descarta 1 carta de miel, y la otra se la regala al jugador rival. Pero sin conseguir nada.
Por esto es un juego de memoria: tienes que recordar qué insectos ha ido dejando cada jugador junto a su hotel.
Usar la miel para atraer insectos gasta el turno del jugador; no puede robar carta si ha decidido atraer insectos.

Comentarios
El primer comentario lo dejamos para la edad recomendada. Realmente nos parece que esos 7 años recomendados en la caja son demasiados: con 5 años se puede jugar sobradamente, e incluso con 4 años, creemos que también. Como siempre, depende de cada niña y niño, por supuesto.
El juego por tanto es sencillo, siendo la mayor dificultad el memorizar qué insectos va acumulando cada jugador rival, boca abajo, junto a su hotel. Así que cuantos más jugadores jueguen, más difícil será, porque a 4 jugadores ya tienes que estar pendiente de los descartes de los 3 restantes.
Incluso tiene cierto nivel de “pique“, porque cuando tienes en tu poder a la araña, vas a tener que decidir a qué jugador perjudicar, con las consiguientes risas y piques. Si juegas con niños muy peques tendrán que aprender a asumir estas cosas 🙂
Otro momento divertido es la aparición de las cucarachas: puedes estar tan feliz, con tus cartas de miel, planificando tu próximo movimiento para atraer insectos… que si te toca una cucaracha, ¡adiós miel!.
Un juego divertido, cortito y sencillo, con una estética muy simpática con esos insectos turistas con maletas y cámaras de fotos. Especialmente nos gusta el detalle de que cada hotel tiene también distintas estéticas: algunos son más rústicos y otros más modernos.
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